Gestión de equipos

Fuga de talento: cómo evitar la pérdida de talento humano en las empresas

La fuga de talento y la rotación de personal son dos términos que toda empresa quisiera evitar. Te contamos cómo puedes disminuirlas en las compañías.

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Isabel García

HR Consultant

software de recursos humanos

3 de noviembre, 2022

En la vorágine de los procesos de rotación de personal, no es extraño que exista fuga de talento. Debido a esto, las empresas deben buscar estrategias que garanticen que estos permanezcan el tiempo suficiente para justificar el esfuerzo de su selección y reclutamiento

De este modo también garantizan el cumplimiento óptimo de los ciclos productivos. Afortunadamente, existen maneras de incentivar y retener el talento clave y aquí podrás encontrar algunos métodos que podrán ayudarte.

¿En qué consiste la rotación de personal? 

La rotación de personal es el proceso en el cual los trabajadores ingresan y salen de una determinada empresa mediante contratación, renuncia, despido o reemplazo de otro trabajador. 

¿Por qué se produce la rotación de personal y fuga de talento?

Existen numerosas causas por las cuales puede ocurrir la rotación personal. En ocasiones puede ser beneficiosa para la empresa. No obstante, cuando la tasa es muy alta, esta resulta perjudicial tanto para empleados, como para la empresa. Es entonces allí cuando es apremiante aplicar estrategias que la disminuyan. Y conocer las verdaderas causas, es la primera de ellas. Así pues, están las siguientes:

  • Mal clima laboral con materiales y equipos de trabajo deficientes.
  • Bajos salarios y que estén además por debajo de la competencia.
  • Incumplimiento de leyes y beneficios laborales por parte de la empresa.
  • Falta de adaptación a la cultura, misión y visión de la empresa.
  • Ausencia de mejores oportunidades dentro de la empresa. 
  • Procesos de selección de personal inadecuados. 
  • Falta de planes de capacitación y formación para los empleados. 
  • Actualizaciones tecnológicas.

Pueden existir además muchas otras razones para cada empresa en particular. Pero en definitiva, todas se derivan de la mala gestión de los elementos que se mencionan arriba. 

Estrategias para reducir la fuga de talento

  1. Indagar acerca de las verdaderas razones de salida del personal. Esto es posible hacerlo con entrevistas que informen acerca de los verdaderos motivos. De este modo podrán tomarse las acciones correctivas que realmente puedan tener un efecto.
  2. Permitir y aumentar la flexibilidad de horario y autonomía del trabajador. Esto se puede hacer a través de medios tecnológicos que favorezcan el teletrabajo. Así pues, es posible usar softwares especializados, computadoras, gestores de proyectos, etc. 
  3. Tomar la iniciativa para indagar las razones que desmotivan al personal. Para ello es posible aplicar encuestas que midan el clima laboral y otros temas relevantes. El proceso de encuestas debe ser rápido y eficiente a través de programas de software especializado.
  4. Aumentar el sentido de pertenencia del empleado a la empresa. Para hacerlo es posible dejarlo aportar ideas, crear eventos sociales para integrarlo, recibirlo con un onboarding de calidad, otorgar premios y reconocimientos, establecer varios canales de comunicación con supervisores y gerentes de recursos humanos, tales como chat, videoconferencias, etc.
  5. Mantener los salarios competitivos. Es decir, ofrecer buenos planes de compensación acorde con el mercado. 
  6. Perfeccionar los procesos de selección de personal con entrevistas y evaluaciones que reflejen el verdadero perfil del candidato. 
  7. Fomentar el crecimiento a través de planes de carrera. y cursos de capacitación constante. 
  8. Fomentar un buen clima laboral con valores de respeto y colaboración. 

¿Por qué es necesario evitar que el talento escape de la empresa? 

La rotación de personal produce efectos negativos que pueden incluso poner en riesgo la continuidad de la empresa. Algunos de ellos son los siguientes:

  • Paralización o demora de proyectos en los cuales participaba el trabajador.
  • Pérdida de inversión de costos de contratación y capacitación.
  • Dificultad para encontrar un reemplazo adecuado, especialmente cuando se trata de personal muy especializado.
  • Disminución de la competitividad de operaciones de la empresa.
  • Creación de mala imagen de la empresa.
  • Riesgo de dispersión de información confidencial acerca de los procesos productivos.
  • Desmotivación del personal que queda en la empresa.

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